Mérida: patrimonio, cultura y turismo

La escasa distancia con otras ciudades influyentes de su entorno la convierte en el centro de toda la riqueza económica, cultural, arquitectónica y ecológica de la región.
Con una población censada en casi 60.000 habitantes, es una ciudad en crecimiento donde el visitante puede descubrir su legado histórico al mismo tiempo que disfrutar de sus costumbres, gastronomía, naturaleza y oferta cultural.

Entusiastas de la historia y la arquitectura podrán realizar las mejores visitas a una Mérida Romana, Visigoda y Arabe. Imperdibles sitios como el Teatro Romano, el Anfiteatro, el Acueducto de los Milagros entre otros.
También descubrir una Mérida BajoMedieval y Moderna, con sus basílicas, conventos y hospitales o una Mérida Contemporánea y Actual, con la Plaza de España, el Puente Lusitania o el Palacio de Congresos y Convenciones, por nombrar algunos lugares.

Rica en cultura, sus museos y colecciones, como el Museo Nacional del Arte Romano o la Colección Visigoda son los sitios donde amantes del arte pueden pasar días enteros.

Para centrarse un poco más en la naturaleza, un paseo en torno a las orillas del Rio Guadiana muestra el gran pulmón verde de Mérida, dividiendo en dos a la ciudad. Entre sus márgenes y las frondosas islas que se forman en el cauce pueden observarse con facilidad gran número de aves entre las que se encuentran: Garcillas Bueyeras, Cormoranes, Gaviotas Reidoras, y, por supuesto, Cigüeñas blancas.

No sólo el casco urbano de Mérida tiene el privilegio de contar con un conjunto arqueológico importante. La comarca de Mérida está plagada de restos que la historia ha dejado diseminados por su geografía. En sus alrededores se pueden realizar excursiones cortas para visitar por ejemplo el Embalse de Proserpina, una de las grandes zonas de esparcimiento de la ciudad; el Embalse y Parque Natural de Cornalvo, en su mayor parte cubierto por dehesas de encina y alcornoque; y formaciones boscosas de matorrales y arbustos y una gran variedad de fauna.