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ANAC realiza inspecciones en rampa
En una ISOR -Inspecciones de Seguridad Operacional en Rampa- se inspecciona la documentación y condición de la aeronave, licencias de la tripulación, datos de vuelo y carga. Estas inspecciones se realizan una vez que la aeronave llega a la plataforma, o antes de la partida del vuelo.
14.08.2019 18:13 | ANAC |
El Programa de Inspecciones de Seguridad Operacional en Rampa (ISOR), desarrollado en el sector aerocomercial de transporte regular de pasajeros, comenzó a realizarse también en la aviación general; es decir en aviones de porte pequeño, aviación ejecutiva, escuelas de vuelo.
Este Programa consiste en un sistema de inspecciones de oportunidad –no se notifican anticipadamente- que se realizan en forma aleatoria para verificar las aeronaves y su documentación -operativa, de aeronavegabilidad y licencias- con el objetivo de detectar la existencia de deficiencias y tomar medidas correctivas para contribuir a la mejora constante de la Seguridad Operacional en la aviación civil.
En una ISOR se inspecciona la documentación y condición de la aeronave, licencias de la tripulación, datos de vuelo y carga. Estas inspecciones se realizan una vez que la aeronave llega a la plataforma, o antes de la partida del vuelo. Entre los ítems a revisar se incluyen las puertas, manijas, ventanillas, controles de vuelo, motores, tren de aterrizaje, cinturones de seguridad, así como también se verifica que la licencia de la tripulación se encuentre vigente.
La evaluación final de la inspección puede resultar con o sin discrepancias. Las discrepancias se categorizan en tres niveles de acuerdo a su tenor, es decir, del impacto que el incumplimiento provoque en la seguridad operacional.
Las de categoría 1 son aquellas discrepancias de influencia menor -Plan de vuelo no firmado por el piloto al mando, suciedad excesiva en zonas críticas, etc.-; las de categoría 2, son aquellas con una influencia significativa en la seguridad -Tornillo(s)/remache(s) faltante(s) o flojo(s) pero con operación permitida de acuerdo a los manuales de mantenimiento-; y categoría 3, de influencia mayor - Hélice dañada, licencia del piloto al mando no adecuada para el tipo de vuelo, etc.-. En algunos casos, la naturaleza de las discrepancias -sobre todo cuando son menores- permite categorizarlas como observaciones. Pero las discrepancias de influencia mayor pueden implicar sanciones tales como: la restricción de la operación de la aeronave; acciones correctivas antes del vuelo; y la detención de la aeronave en tierra o el retiro de la autorización para operar.
Desde 2015 a la fecha la ANAC realizó unas 5475 inspecciones ISOR a las aeronaves y tripulaciones de todas las compañías aéreas para garantizar la seguridad en las operaciones de transporte de pasajeros. Actualmente, la Autoridad Aeronáutica cuenta con siete equipos de inspectores ISOR, de los cuales cinco están abocados a las operaciones de transporte regular y otros dos especializados en transporte no regular y aviación general, que están de forma permanente en los aeródromos de San Fernando y Morón, en la Provincia de Buenos Aires.
De esta forma, la autoridad aeronáutica continúa trabajando para alcanzar los más altos estándares de seguridad operacional en la aviación civil argentina.
Este Programa consiste en un sistema de inspecciones de oportunidad –no se notifican anticipadamente- que se realizan en forma aleatoria para verificar las aeronaves y su documentación -operativa, de aeronavegabilidad y licencias- con el objetivo de detectar la existencia de deficiencias y tomar medidas correctivas para contribuir a la mejora constante de la Seguridad Operacional en la aviación civil.
En una ISOR se inspecciona la documentación y condición de la aeronave, licencias de la tripulación, datos de vuelo y carga. Estas inspecciones se realizan una vez que la aeronave llega a la plataforma, o antes de la partida del vuelo. Entre los ítems a revisar se incluyen las puertas, manijas, ventanillas, controles de vuelo, motores, tren de aterrizaje, cinturones de seguridad, así como también se verifica que la licencia de la tripulación se encuentre vigente.
La evaluación final de la inspección puede resultar con o sin discrepancias. Las discrepancias se categorizan en tres niveles de acuerdo a su tenor, es decir, del impacto que el incumplimiento provoque en la seguridad operacional.
Las de categoría 1 son aquellas discrepancias de influencia menor -Plan de vuelo no firmado por el piloto al mando, suciedad excesiva en zonas críticas, etc.-; las de categoría 2, son aquellas con una influencia significativa en la seguridad -Tornillo(s)/remache(s) faltante(s) o flojo(s) pero con operación permitida de acuerdo a los manuales de mantenimiento-; y categoría 3, de influencia mayor - Hélice dañada, licencia del piloto al mando no adecuada para el tipo de vuelo, etc.-. En algunos casos, la naturaleza de las discrepancias -sobre todo cuando son menores- permite categorizarlas como observaciones. Pero las discrepancias de influencia mayor pueden implicar sanciones tales como: la restricción de la operación de la aeronave; acciones correctivas antes del vuelo; y la detención de la aeronave en tierra o el retiro de la autorización para operar.
Desde 2015 a la fecha la ANAC realizó unas 5475 inspecciones ISOR a las aeronaves y tripulaciones de todas las compañías aéreas para garantizar la seguridad en las operaciones de transporte de pasajeros. Actualmente, la Autoridad Aeronáutica cuenta con siete equipos de inspectores ISOR, de los cuales cinco están abocados a las operaciones de transporte regular y otros dos especializados en transporte no regular y aviación general, que están de forma permanente en los aeródromos de San Fernando y Morón, en la Provincia de Buenos Aires.
De esta forma, la autoridad aeronáutica continúa trabajando para alcanzar los más altos estándares de seguridad operacional en la aviación civil argentina.
