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Destinos | TERRITORIOS RICOS EN TRADICIONES, HISTORIAS Y TESTIMONIOS ARTÍSTICOS

Destino Italia: Abruzos

Situados en el centro meridional de Italia, los Abruzos se extienden desde el corazón de los Apeninos hasta el mar Adriático, a través de un territorio predominantemente montañoso y salvaje.  

03.05.2019 00:21 |  Agencia Nacional de Turismo de Italia | 

En la alta montaña, entre cumbres impolutas y paredes rocosas surgen localidades turísticas y complejos equipados para el esquí y los deportes de invierno como Pescasseroli, Rivisondoli y Roccaraso. El escenario natural de los picos elevados e inaccesibles del Gran Sasso, los Monti della Laga y la Majella desciende luego hacia un amplio sistema de colinas, para llegar por fin a la costa adriática.

El recorrido desde el Gran Sasso hasta el mar atraviesa territorios ricos en historia, tradiciones y testimonios artísticos que no dejan nunca de sorprender a sus visitantes.
Entre las montañas y colinas se encajan estrechos valles y rutas históricas naturales, entre los que destacan el escenográfico y sugestivo Valle del Aterno, plagado de antiguos burgos. Son numerosas las reservas naturales, como el Parque nacional de los Abruzos, el Parque del Gran Sasso y Montes del Laga o el de la Majella, que garantizan la protección de especies vegetales y animales típicas de la zona como el águila real, el lobo y el oso marsicano.
El litoral de los Abruzos se caracteriza por largas y arenosas playas en la parte septentrional, mientras que al sur predominan las playas de guijarros. Están llenos de encanto los pequeños pueblecitos del interior, los monasterios y los castillos de la región, que son objeto de muchas y variadas rutas turísticas en la región más verde de Italia.

Que visitar
La ciudad artísticamente más representativa de la región es L’Aquila, situada en las laderas del Gran Sasso y caracterizada por un incalculable patrimonio artístico: desde la magnífica Basílica de San Bernardino hasta el castillo del siglo XVI, pasando por la Basílica de Santa María de Collemaggio o la Fuente de los 99 caños, ricamente decorada con dicho número de mascarones de piedra. La ciudad del "perdón celestiniano" ofrece innumerables itinerarios de historia, de arte y de fe.
Por desgracia, el terremoto del 6 de abril de 2009 ha causado graves daños a la ciudad y al territorio circunstante, causando incalculables daños a sus valiosos tesoros artísticos.
En esta zona existen múltiples testimonios de la compleja historia de los Abruzos, desde el famoso Castillo de Celano, hoy sede del Museo Arqueológico y de Arte Sacra, hasta los restos de la antigua ciudad romana de Alba Fucens.
En la vertiente adriática, caracterizada por largas y arenosas playas destaca Pescara, la ciudad natal del poeta Gabriele D’Annunzio.
Son numerosas y características las localidades turísticas costeras: Tortoreto, Giulianova, Silvi Marina, Roseto y bajando hacia el sur Ortona, Vasto y San Salvo.
Chieti, situada en las colinas en las proximidades de la costa, alberga una maravillosa catedral del siglo XI; de especial interés también es el Museo Arqueológico Nacional, con sus numerosísimos restos prehistóricos y sus testimonios de las civilizaciones griega y romana.
Otra ciudad importante es Teramo, con su catedral medieval y los restos del teatro y el anfiteatro de época romana.
Son innumerables los viejos burgos, que atesoran una civilización campesina que aún mantiene vivas sus tradiciones gracias al folklore y a la artesanía local. Una de las localidades más características es Scanno, con sus estrechas callejuelas, sus portales barrocos y sus antiguos edificios, es un pueblecito característico del valle del Sangro, situado en las inmediaciones de un encantador lago.
Sulmona, patria del poeta Ovidio, es rica en historia y tradiciones; custodia valiosos testimonios artísticos y también la famosa ermita de Celestino V.
El variado panorama de los Abruzos propone diferentes tipos de vacaciones, todas apasionantes y llenas de sorpresas.
Las cumbres más altas de los Apeninos y las famosas localidades turísticas Roccaraso, Rivisondoli, Pescasseroli y Campo Imperatore acogen con modernas instalaciones y un amplio sistema de pistas a los amantes del esquí, el snowboard y el snowrafting, mientras que las rutas para el esquí de fondo se internan en los magníficos paisajes del Parque Nacional de los Abruzos, Lacio y Molise.
Son numerosos los deportes para practicar en contacto con la naturaleza: paseos y excursiones a pie, en mountain bike o rutas de trekking en zonas protegidas o en lugares de especial valor natural como las espléndidas Gargantas del Sagitario, las cascadas de Zompo lo Scchioppo, o los lagos de Penne y Serranello, donde se pueden avistar también las especies de pájaros más singulares.

Actividades
Desde el Gran Sasso hasta el Sirente, el entorno de alta montaña es especialmente apto para el alpinismo y la escalada.
Para los amantes de la equitación son innumerables las posibilidades de excursiones a caballo, mientras que en el Parque del Gran Sasso y Montes de la Laga es posible recorrer una ruta hípica de centenares de kilómetros por entornos naturales de especial valor.
A lo largo de la costa es posible practicar todos los deportes náuticos: vela, canoa, pesca, windsurf, gracias a la presencia de playas equipadas y estructuras modernas. Amplio espacio también para los itinerarios en bicicleta entre pinares y hayedos, para luego pasar las noches en busca de la diversión en las discotecas, locales y restaurantes de las diferentes localidades costeras.
Son importantes también los restos arqueológicos de la zona fucense en el Valle del Fucino. Sede de un lago, hoy seco, el territorio estaba íntimamente ligado a la Roma imperial y en él destacan las ruinas de Alba Fucens, ciudad romana en la falda del Monte Velino a pocos kilómetros de Avezzano y los restos de antiguas domus romanas y necrópolis autóctonas.
Numerosos los itinerarios religiosos hacia lugares de devoción sumergidos en entornos incontaminados, entre ellos la famosa Ermita de Celestino V, encajonada en una pared rocosa o la iglesia románico-gótica de Santa María de Propezzano en el valle del Vomano.
Los amantes de la buena mesa pueden internarse entre olivares y viñas, desde la costa adriática hacia el interior hasta el Valle Peligna para visitar bodegas y degustar vinos, aceites y exquisitos productos locales.
Por último, no hay que perderse las manifestaciones de folklore, las fiestas religiosas y los acontecimientos culturales: desde la famosa Fiesta de la Perdonanza (“perdón”) en L’Aquila, hasta la fiesta de los Serpari de San Domenico en Cocullo, pasando por el Pesebre Viviente de Rivisondoli o las numerosas romerías que llevan a cabo los pequeños burgos.

Su gastronomía
Los Abruzos poseen una rica tradición gastronómica, con tradiciones específicas, unidas a cada una de las provincias.
Reinan en la mesa los macarrones a la guitarra, pasta hecha en casa cortada con un telar de hilos de acero; típicas de la zona de Teramo son las scrippelle, finas láminas de pasta con caldo; en la costa abundan los primeros platos a base de pescado, a menudo con tomate para exaltar el gusto del "pescado pobre" que se pesca en el mar cercano a las antiguas localidades marineras.
Entre los segundos, una receta típica de la zona de Chieti es el scapece, pescado frito conservado en vinagre, el guazzetto o "caldo de pescado" que se consume principalmente en los centros costeros y, con variaciones, en las zona de Teramo.
Por lo que respecta a la carne, es el plato fuerte de los montes de Abruzos, especialmente en Teramo y L'Aquila, zonas tradicionalmente dedicadas a la cría ovina. Son comunes, en cualquier localidad de Abruzos, los menús a base de cordero, cabrito y oveja. Los embutidos como el jamón, la lonza (lomo de cerdo) y la ventricina (chorizo de cerdo) son el plato fuerte de las zonas montañosas.
La comida típica de los Abruzos se presenta regada por una selección de los mejores vinos regionales: Montepulciano d’Abruzzo, Sangiovese y Trebbiano d’Abruzzo que con el tiempo han conquistado el mercado nacional e internacional por la atención que ponen en la producción y la óptima relación calidad-precio. Son muchas las producciones de vino biológico especialmente en Chieti y Teramo.
Entre los dulces, a menudo a base de almendras, destacan los turrones, los confetti -especialidad de Sulmona- y la cicerchiata, pequeñas bolitas de pasta frita bañadas en miel, los mostaccioli (dulces de chocolate) y el renombrado bocconotto, típico de la zona de Chieti.